La muerte es un tema tabú que se vive normalmente de una manera triste, con desesperación, incertidumbre y principalmente con miedo…
Más allá de todo aquello que pueda despertar la muerte en nosotros y pensar qué hay después de la muerte, o qué pasa al momento de experimentarla, lo importante es tener en mente que es parte de la vida.
Que la vida en este planeta trae consigo esa experiencia de trascender hacia una nueva forma de vida, porque te aseguro que la muerte no es un final, sino un inicio.
Y me atrevo a decirte que no vinimos a este mundo a aprender a vivir, sino que vinimos a aprender a morir, ya que cuando morimos, es la verdadera vida, porque cuando morimos, verdaderamente estamos en estado absoluto de iluminación.
Adicionalmente, morimos a infinidad de cosas en cada instante de nuestra vida, así es que quien no está lleno de muertes, no está lleno de vida.

Somos un espíritu teniendo una experiencia carnal y no al revés como nos han hecho creer y esto es lo que ha hecho que la muerte nos parezca el final de la vida, verlo de este modo es aterrador, por eso te dejo 3 tips para que puedas ver la muerte desde otra perspectiva.
1. Cultiva tu espíritu.
El tener presente que somos espíritu nos permite tener la certeza de que el morir no es un final, sino el inicio de algo más.
La vida va mucho más allá de esta experiencia física, no somos solo un cuerpo, al morir nuestro espíritu deja el cuerpo y continúa la vida desde otro nivel, ya siendo un ser más sabio y evolucionado después de la experiencia carnal.
Existen diferentes formas de cultivar el espíritu:
· Reconocer tu origen divino.
· Cuidar lo que escuchas y ves, que sea normalmente positivo, y colabore en mantenerte en ese estado.
· Cuida tu alimentación.
· Descansa.
· Medita.
· Actúa desde el amor hacia ti mismo y quienes te rodean.
2. Considera que es un proceso natural de la vida.
Nos han bombardeado con noticias acerca de los avances de la medicina, los trasplantes de órganos, etc. todo aquello con la posibilidad de alejarnos de la muerte, haciendo de ella lo más trágico que nos puede suceder.
Recuerdo que de niña pensaba acerca de aquello que llegara a preocuparme: que importa lo peor que me podría pasar sería que me muriera, pero el examen no me va a matar.
Hay padres que suelen decirles a sus hijos:, “el día que me muera estarán solos”, y así infinidad de ejemplos de cómo nos han ido programando a que lo mejor que podemos hacer es evitar la muerte, pero…
¿Realmente podemos evitar la muerte? La respuesta es NO, es un proceso que al igual que el nacimiento en este mundo todos experimentamos en algún momento, de modo que lo mejor que podemos hacer es prepararnos para ello.

3. No es una enemiga para vencer.
Al ser una experiencia que forma parte de la vida, lo peor que podemos hacer es luchar contra ella, todo aquello con lo que decidimos luchar, termina por ser absolutamente agotador y doloroso.
Y es así porque el simple hecho de pensar que podemos tener el ‘control’ de algo es falso, hemos venido a esta vida a experimentar y a evolucionar con cada experiencia, por lo que el querer controlar ese aprendizaje es absurdo, es limitarnos y no es posible.
Por lo tanto, la experiencia de la muerte no es la excepción, estar conscientes de que no es algo que podemos evitar, pero sí aprender a llegar a ella, nos permite eliminar el miedo y la incertidumbre cuando llegue el momento.
Teniendo presentes estos puntos, nos es posible vivir libres del miedo a la muerte, felices y en verdadera consciencia que nos lleva a evolucionar.
No es una tragedia y no es un final, de hecho, es una experiencia parecida al nacimiento, ya que al nacer ‘morimos’ al vientre de nuestra madre y nacemos a este mundo, de igual modo al trascender esta experiencia física ‘morimos’ al vientre terrenal y nacemos a una nueva vida.
Una vida consciente e ilimitada, llena de existencia y sin las limitaciones a las que nos sujeta poseer un cuerpo físico.
Estamos ya en vísperas de Navidad, una fecha en la que la melancolía se hace presente por aquellos que han partido y su ausencia física nos duele. El cambiar la forma en que vemos la muerte nos reconcilia y reconforta para pasar estas fechas en Amor y gratitud por todo lo que vivimos y compartimos con ellos.
Llegar plenos, llenos de amor al momento de nuestra muerte y sin la incertidumbre de qué pasa después de la muerte, es posible; para saber cómo, da clic en el siguiente enlace