Si buscamos una definición de meditación actualmente nos encontramos que es una práctica que promueve la relajación, que nos ayuda a reducir los niveles de estrés porque contribuye a eliminar pensamientos nocivos que nos mantienen en malestar.
Y se puede considerar hasta una terapia complementaria para reforzar buenos o excelentes resultados para recuperar y mantener la salud.
Más allá de eso y que lo anterior son solo unos beneficios que ofrece llevar a cabo la meditación, me gusta considerar a la meditación no tanto como una técnica o alternativa, sino como una necesidad… ¿Pero en qué sentido?
Uno de los factores predominantes en los niveles de estrés, intranquilidad, ansiedad, etc. Es provocado por creaciones de nuestra mente, lo que ella supone y nos dice en el día a día.
Por lo tanto, el mantener en calma a la mente se traduce en calma en nuestras vidas, la meditación nos lleva a vivir presentes, conscientes y sin juzgar lo que sucede, nos responsabiliza de ser la causa de todo lo que tenemos a nuestro alrededor, mejora nuestra respiración con lo cual la oxigenación de nuestro cerebro y de todos los órganos del cuerpo mejora trayendo salud a nuestras células.
Siendo conscientes de esto, se vuelve una necesidad mantener tranquila la mente para vivir plenos y felices, lejos de aquellas prisas y malestares que nos han hecho creer que son normales.

Nuestra naturaleza es ser felices, y es posible conseguir esta felicidad cuando nuestra mente está en foco de crear las estrategias apropiadas, acordes a una información consciente y veraz, resultado de la meditación; el problema es que no nos han enseñado a cuidar nuestra salud mental y espiritual, solo la física.
La meditación aparte de mantenernos serenos y en nuestro centro, nos transforma como seres humanos, pero… ¿Por qué lo consigue?
Te dejo 5 razones por las cuales la meditación nos transforma:
1. Nos muestra quiénes somos.
El cómo pensamos, define cómo nos sentimos y cómo actuamos, por eso las acciones y actitudes con las que vamos por la vida dicen todo de nosotros; estas acciones o mejor dicho ‘reacciones’ son inconscientes.
Son respuestas a información guardada en el ADN de nuestras células y se revela en momentos específicos.
Cuando nos tomamos el tiempo de meditar y poner atención a los pensamientos que genera nuestra mente, podemos darnos cuenta de la dinámica que maneja nuestra mente.
Así nos volvemos conscientes del patrón de pensamiento que tenemos que eliminar para cambiar nuestros resultados, ya que somos seres creadores de nuestra realidad, la cual está sujeta a nuestros pensamientos y emociones.
2. Permanecer en calma mental permite que mostremos nuestro lado amable.
Cuando estamos en calma y comenzamos a vernos tal cual somos, podemos comenzar a aceptarnos, a ir eliminando la culpa hacia los errores que hemos cometido, a perdonarnos porque no éramos ‘conscientes’.
Al permanecer tranquilos, en paz mental, el conflicto pierde foco en nuestras vidas, deja de ser necesario, ya no tenemos interés en pelear; razón por la cual comprendemos que somos seres únicos y valiosos, todos por igual.
Por lo tanto, dejamos de exigir a los otros y a nosotros mismos para dar paso al Amor, la comprensión y aceptación de las persona y las situaciones tal y como son.
Nuestro lado amable sale y me atrevo a decir que hasta puedes sentir un profundo Amor por personas que no conoces, porque desde la calma puedes percibir su esencia Divina y Amarla.

3. Te conecta con tu parte Divina.
Recuerdo que en una ocasión una persona me decía que ella no creía que Dios se interesara en nosotros por ser unos simples humanos, te tengo que confesar que su comentario me provocó tristeza.
Sucede que mi pensamiento hacia su comentario fue parecido a lo que en algún momento comentó nuestro Amado Maestro Jesús, cuando pidió que fuéramos perdonados por no saber lo que hacíamos.
Pensé que esa persona tenía un concepto muy pobre acerca de ella misma como ser humano.
Los seres humanos somos seres maravillosos con la capacidad hermosa de sentir una gran variedad de emociones, con la libertad de decidir y crear porque Dios vive dentro de cada uno de nosotros.
La meditación nos ofrece la oportunidad de conectar con nuestro espíritu, de hacernos sentir esa GranDiosidad que habita en cada uno de nosotros.
Fomentando así una fuerza poderosa que arrasa una vez despierta y se trata de nuestra fuerza espiritual.
4. Nos mantiene enfocados en el momento presente.
Cuando nuestra mente está alterada nos mantiene pensando en lo que ya pasó y en lo que cree que puede pasar, perdiéndonos de los detalles de lo que estamos viviendo en el momento presente.
Cuando meditamos ponemos atención absoluta en el instante que estamos viviendo, comprendiendo la tristeza, la nostalgia, la depresión acerca de aquello que hemos vivido en el pasado, así como la ansiedad por lo que podría suceder en el futuro. Sin intentar cambiar nada, solo aceptando y tomando acción desde la observación plena.
Traduciéndose en un profundo bienestar y gratitud por medio de la certeza de lo que sí tenemos y estamos viviendo, haciendo de nosotros seres conscientes, agradecidos y presentes en cada momento de nuestra vida.
5. Cambia nuestra visión del mundo.
Meditar no solo nos conecta con nuestro interior sino abre de una manera espectacular nuestra visión hacia aquello que nos rodea y no habíamos tomado en cuenta por estar inmersos en nuestra mente, nos permite sentir y estar conscientes de toda la vida que existe a nuestro alrededor.
Cuando hemos conseguido conectar con nuestra Divinidad, podemos percibirla en todo lo demás también.
Lo cual nos llena de confianza y certeza porque ésta se manifiesta de alguna u otra manera, dicho en otras palabras, podemos entender el lenguaje Divino que existe en el mundo.
Podemos sentir el amor y la bondad que existe a nuestro alrededor, cambiamos nuestra vibración, manifestando desde nosotros personas y situaciones creadas desde el amor y no desde el conflicto.
Por lo tanto, nos encontramos y vemos un mundo mejor, bello y mucho más amable.
La práctica de la meditación no es algo que convenga tomarlo a la ligera, porque requiere de seriedad, es indispensable contar con formación para poder obtener resultados efectivos y permanentes.
Existen muchos tipos de meditación que se adecúan a todas las necesidades, en IRB contamos con meditaciones guiadas que te llevan a ir a lo más profundo de tu ser y modificar tu información a niveles tan profundos como tu ADN.
Acceder de una manera consciente a tu información genética nos permite reprogramarla para tener resultados espectaculares, si quieres conocer nuestras meditaciones puedes consultar el siguiente enlace