A veces pensamos que es muy fácil amar a nuestra pareja, a nuestros hijos, a nuestros amigos más cercanos o a nuestros padres y hermanos, incluso a nuestras mascotas. Pero amar a esa persona que nos hizo daño, marcando la vida o protagonizando un evento doloroso, se vuelve un desafío cuesta arriba. A través de este artículo descubre cómo superar el abuso sexual desde el Amor, reconociendo qué es la culpa y cómo puedes vivir de otra manera sin permanecer atado a los acontecimientos que no quieres revivir.
Es que gran parte del dolor viene porque sigues enganchado a tus heridas y al pasado donde sucedió ese hecho imborrable. Es allí donde todos los movimientos suelen darse en un ‘tira y afloje’ constante que no termina nunca. Y tus emociones van y vienen, proyectando sombras en cada nueva situación que te condiciona.
Entonces empiezas a vivir todo un proceso terapéutico desde distintas perspectivas, a veces hasta con profesionales diferentes y enfoques que te hacen subir y bajar en una montaña rusa de emociones.
El proceso de recuperación después de ser víctima de abuso
La realidad es que para descubrirte de nuevo sin estar condicionado por tu parte victimizada y culpable, hay que procesar mucha información. Esto siempre lleva un tiempo y no se soluciona de la noche a la mañana.
Por lo tanto, quien fue víctima de abuso suele empezar terapia con un profesional para resolver sus traumas y enfrentar las consecuencias emocionales y psicológicas que persisten después del abuso.
El proceso de terapia puede variar según las necesidades individuales de cada persona y la gravedad del trauma. Suele implicar el poder trabajar en la recuperación de la autoestima y la confianza en sí mismo, aprender a establecer límites saludables, y desarrollar estrategias para manejar los síntomas de ansiedad y depresión que a menudo acompañan al trauma.
La terapia también ayuda, a quien padeció el abuso, a procesar lo sucedido y comprender cómo esto ha afectado su vida y sus relaciones. En este caminar sin prisa, la persona aprende a identificar patrones de pensamiento y comportamientos disfuncionales, para reemplazarlos por otros más saludables y adaptativos.
Sin embargo, estas son técnicas tradicionales de superación del abuso. En IRB contamos con la Sesión Personalizada de Sincronización Cuántica que puede desinstalar los programas que ese episodio dejó, en una sola sesión, para poder vivir libre de dolor, culpa, resentimiento y memorias dolorosas.
Estos son los 4 amores para regresar a ti mientras te vuelves a amar
Es importante señalar que el proceso de recuperación de un trauma como el abuso no tiene un tiempo aproximado para darse de alta. Basta con recibir el apoyo adecuado y la dedicación para querer trabajar en la propia recuperación, en el tiempo que cada persona elija dentro de su realidad.
De hecho, una de las preguntas más recurrentes es sobre «¿qué es la culpa?». Porque la persona carga con esto a todas partes. Se siente responsable de algo que salió mal o de lo que pudo haber hecho para evitar el acontecimiento, considerando una serie de decisiones incorrectas que no sabe cómo reparar o justificar.
Sin embargo, la culpa es un sentimiento bastante común entre las víctimas de abuso, sobre todo en su proceso de recuperación. La culpa se convierte en un mecanismo de defensa psicológico, que algunas personas usan para tratar de sentir que tienen algún tipo de control sobre lo que ha sucedido. O al menos pueden racionalizar por qué ocurrió el abuso.
De todas maneras, es importante destacar que el abuso jamás es culpa de la víctima, sino de quien lo comete, ya que es el único responsable de sus acciones y de las consecuencias.
Pero quien te agredió antes ya no es parte fundamental en tu vida y puedes comenzar a mirar desde otra óptica más reconciliada, humana, incluso personal. Un proceso que también te hace identificar a tu agresor, como víctima de su propia realidad. Porque… ¿quién causa daño si no lo experimentó antes?
Y en este proceso de ‘perdón’ y reconciliación con tus heridas de abuso vas experimentando 4 tipos de amores:
1- Amor hacia tu niño interior: comprendes sus sentimientos, los acoges con calidez, sin crítica y feliz de todo lo que fue capaz. Incluso para dejar la vergüenza atrás y ese sentimiento de culpa constante.
2- Amor al presente: porque cuando quedas anclado al pasado de una herida abierta, las consecuencias siguen modificando tu presente.
3- Amor a quien te agredió: Aquí hay 2 focos: Uno es el suceso y otro la persona con la que vives el suceso. En el primero comprendes el sinsentido de seguir luchando, rabiosa y enojadamente, contra tu pasado. Algo que ya no puedes deshacer. Y en segundo lugar, dejar de actuar frente a la culpa de sentirse víctima, que sí lo fuiste, pero que en adelante, no debe condicionar tu futuro.
4- Amor a ti mismo: Aprendes a amarte sin seguirte negando a ti mismo, porque la vida desde el miedo, dolor y enfado, no es vida para nadie. O al menos una vida de libertad. Reconocer que tú también tienes derecho a disfrutar todo, en los tiempos que tú quieras y a tu manera.
Hasta que vives el ‘regalo del trauma’.
«¿Regalo en el trauma? Eso es imposible»
Cuando el silencio es
tu única respuesta frente al abuso
El abuso sexual es un problema que afecta a muchas personas en todo el mundo. El amor y la compasión pueden ser herramientas poderosas en la recuperación de esta experiencia traumática.
Sin duda alguna, al vivir un abuso muchas personas se preguntan: ¿qué es el miedo y cómo se puede superar? Porque en verdad quieren aprender, que lo que pasaron, no los condicione con temores y miedos importantes.
De igual modo, como el proceso es personal, si aún guardas en silencio lo que has vivido te recomendamos escuchar la experiencia de Olga Gil. Ella sufrió un abuso sexual en su infancia y hoy puede ayudarte a encontrar voz a lo que todavía te cuesta ponerle palabras… durante este proceso.
Cómo superar el abuso sexual desde el Amor con Olga Gil y Ximena Duque Valencia: